viernes, 24 de febrero de 2012

Siempre nos quedará Anís el Mono

Dos meses después vuelvo a sentarme en la silla en la que pasé tantas horas delante del ordenador. Dos meses después vuelvo a escribir, pero esta vez, no para que lo lean otros sino como terapia para expresar todo lo que me pasa por la cabeza.

Durante este tiempo he tenido que escuchar cómo muchos me preguntaban si estaba arrepentida de la decisión que tomé y mi respuesta es siempre la misma: No. ¿Cómo estar arrepentida cuando has aprendido tantas cosas? ¿cuándo posiblemente por primera vez en mi vida me he valorado y, por qué no decirlo, me han hecho ver que sirvo para esto? Que las cosas no salieron como me hubiese gustado es evidente, pero lo es más que la coyuntura actual me pasó factura y no fui la única.

El mismo día en el que se ha anunciado el cierre de un periódico de tirada nacional y que las cifras de parados en el sector suben como la espuma, me planteo si merece la pena mantenerme en mi empeño de encontrar algo que se ajuste a mis conocimientos y a mi experiencia.

Han sido dos meses de buscar a diario en Internet, enviar cientos de curriculum vitae, buscar ofertas de trabajo pero la conclusión es siempre la misma, el silencio. Nadie responde y te queda la sensación de que este tiempo 'en blanco' podrías invertirlo en darte golpes contra una pared dura como el acero, nadie te va a parar porque a nadie le importas.

En medio quedan opciones de formación, no las deseadas porque esas se escapan a cualquier maltrecho presupuesto, pero sí como me dijo un amigo, servirá para coleccionar etiquetas de Anís el Mono. ¡Y qué remedio! Al menos tengo la suerte de que algún centro de formación sí se digna a contestar mis correos.

1 comentario:

  1. Enhorabuena, por tu entrada. Por ti apenas me entero además de que mi diario de referencia deja de salir a los quioscos mañana. Sabía que iba a ocurrir pero no quería pensar en ello. En cuanto a ti, adelante, y muy bien por tomar las decisiones correctas, sobre todo si sirve para algo. El mundo no se acaba en "la piel de toro" ni en esa islita pegada a África que habitas [ ;) ]...hay que seguir adelante...todos! Un abrazo y ni caso al victimismo español...los españoles siempre salen adelante donde quieran que habiten: vosotros sois el ejemplo, jeje. Un abrazo!

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